Autor: José Pablo Arellano
Fuente: La Tercera
AL ENTREGAR los resultados de la PSU de este año, junto con celebrar a los 220 puntajes nacionales, con toda razón se hizo un reconocimiento especial a José González Pincheira. Es que obtuvo puntaje máximo en las tres pruebas: Ciencias, Matemática y Lenguaje. Muy merecidas felicitaciones para este joven de Pudahuel, egresado del Instituto Nacional, ex alumno de la escuela básica Andantino y del colegio Andacollo.
Hace pocas semanas conocimos los resultados de la principal prueba internacional de aprendizajes: la prueba Pisa, realizada en 65 países, a estudiantes de 15 años. En esa prueba, un 2% de los estudiantes chilenos logró un puntaje de desempeño top o superior en alguna de las tres pruebas, algo parecido al puntaje nacional. En esa misma prueba internacional, el 56% de los estudiantes de Shanghai alcanzó el máximo resultado. Sí, 56%, no es error de transcripción. En Singapur, el 41%, en Hong Kong un 36%, en Corea un 32% y para el conjunto de los países de la Ocde, el 16% de los estudiantes logró desempeño top en alguna de las tres pruebas. No sólo eso: el 19,6% de los estudiantes en Shanghai obtuvo el equivalente a nuestro triple puntaje nacional, logrando un desempeño superior en los tres dominios: Matemática, Ciencia y Lenguaje. En otros lugares como Singapur ese triple resultado lo obtuvo el 16%, en Hong Kong el 11% y en Corea el 8%, mientras en nuestro país sólo el 0,2% destacó en esa misma forma.
Hay varios elementos que explican el alto desempeño de los sistemas educacionales en esos países o regiones, pero hay un factor común: la confianza en que todos pueden aprender, si ponen suficiente esfuerzo y dedicación de su parte. Se trata de sistemas educacionales muy meritocráticos, donde el esfuerzo por aprender es parte de la cultura nacional. En este contexto, se estima que a los estudiantes más vulnerables no hay que bajarles las exigencias, sino, por el contrario, apoyarlos y animarlos para que compensen con su esfuerzo y dedicación sus desventajas.
Tan claro lo tienen los estudiantes en Corea, por ejemplo, que el gobierno ha tenido que fijar un toque de queda a los cursos equivalentes a nuestro preuniversitario, para así limitar las trasnochadas de los escolares asistiendo a estos cursos de reforzamiento. Sí, toque de queda no para el carrete y el alcohol, sino para el estudio.
Altas expectativas en lo que todo alumno puede lograr, si lo apoyamos para que se esfuerce. Eso es lo que ha llevado a otros jóvenes chilenos a apoyar a nuestros estudiantes, motivándolos para que aprendan más y mejoren su desempeño. Por ejemplo, un grupo de profesionales que crearon un preuniversitario online: puntajenacional.cl, en el cual se preparan de manera gratuita para la PSU miles de estudiantes. Otro caso es Enseña Chile, que convoca y prepara a jóvenes profesionales para que dediquen un año a la enseñanza en un colegio vulnerable del país.
La confianza en lo que los niños chilenos pueden lograr en matemáticas, ciencias, lenguaje, música, literatura o deporte, nos obliga a darles todo nuestro apoyo y a decirles con toda claridad que no podemos bajarles las exigencias, sino, por el contrario, que la mayor parte depende de su esfuerzo y dedicación. Es el ejemplo y la confianza que representa para otros jóvenes el triple puntaje nacional de José González Pincheira.